top of page
1.jpeg

Sindy Sabrina Silveira

Sindy Sabrina Silveira Rivera es una joven rural comprometida con su educación y su legado familiar en el campo. Mantiene un fuerte vínculo con la producción ganadera y agrícola de su familia, que ha sido parte de su vida desde pequeña.

Su deseo es seguir en el campo y contribuir a la producción familiar, alentando a otras personas jóvenes a no rendirse en sus aspiraciones. Su historia refleja la importancia de la educación, el trabajo colectivo y la conexión con la tierra.

Sindy y su familia

Nació el 20 de diciembre del 2000 en la ciudad de Rivera, actualmente tiene 23 años de edad. Vive en la zona de Cuchilla de Tres Cerros, a 15 kilómetros de la ciudad de Rivera, en el predio de su familia paterna.

Su familia está conformada por sus padres Belkis y Alejandro y su hermana menor Estefani. “Además, viven en el predio mi abuela paterna Liria y mi tío paterno Daniel”.

Su trayectoria educativa

2.jpeg

Sindy y su familia. 

Sindy cursó educación primaria en la escuela rural de la zona, la Escuela Nº 66 – Parada Mulatieri, que quedaba “a unos 3 kilómetros de casa por la ruta 5. En los primeros años, mi padre me llevaba y me iba a buscar en moto y luego empecé a ir y volver en ómnibus, que nos dejaba en la parada y de ahí íbamos caminando hasta la escuela. En la vuelta, tomábamos el ómnibus en la Aduana de Curticeiras, ya que paraba ahí y era solo cruzar la ruta”.

 

 

Para realizar la educación secundaria, tuvo que viajar a Rivera: “viajaba todos los días en ómnibus. A veces, me tocaba quedarme en la casa de mi abuela materna, que vive en la ciudad, por temas de horarios o porque tenía educación física o trabajos”.

 

Culminó la secundaria y se proyectó continuar estudiando. “Al culminar secundaria, me fui por un año a Salto a estudiar Derecho, pero al año siguiente tuve que volver a mi pago, debido a la pandemia. Al transcurrir el año y con la continuidad de la pandemia, decidí empezar a estudiar algo en la ciudad de Rivera, por cercanía y mejor locomoción por todo el tema del COVID. Por eso, al año siguiente inicié el curso terciario de Técnico en Administración de Empresas en UTU de Rivera, título que obtuve en diciembre del año 2022”.

 

Durante los dos años que estudió la Tecnicatura en Administración de Empresas, Sindy viajó en ómnibus todos los días durante la noche, horario en que se dictaban las clases.

Actualmente, trabaja fuera del predio, “en una cooperativa financiera de la ciudad de Rivera, de lunes a viernes, lo que hace que deba pasar gran parte del día fuera de casa”.

La actividad productiva

3.jpeg

Producción de boniato en el predio familiar.

Su familia se dedica principalmente a la ganadería y plantación de chacra, proceso que ha pasado de generación en generación “tanto desde mi familia materna como paterna. Mis abuelos paternos toda su vida desarrollaron ambos rubros dentro del predio donde vivimos, luego que mis padres se casaron, empezaron ellos también en ambos rubros”.

 

Con respecto a la producción ganadera, la desarrollan en el predio de su casa, donde trabajan la raza Braford, hacen cría y recría, la reposición la hacen con las propias terneras que van saliendo y se cambian los toros cuando es necesario.


También forman parte de un grupo de productores/as de la SFR Curticeiras, que hacen ganadería de forma colectiva en un campo rentado al Instituto Nacional de Colonización, donde manejan la raza Angus; se busca tener un lote parejo entre todos los productores. La comercialización de los terneros se hace de forma particular, con escritorios o compradores particulares.

Actualmente, “de chacra plantamos algunas hectáreas de boniato, sandía, maíz y lo que se pueda, principalmente para nuestro consumo; este año plantamos más boniato para la venta”, comenta Sindy.

Siempre realizó diferentes tareas ayudando en todo lo que había que hacer en la chacra. “Desde chica siempre ayudé en el manejo del ganado y con las plantaciones”. En tanto, su vínculo con lo rural es “desde siempre. Me crié donde vivo, siempre ayudando en el campo con los animales, en la chacra o en la quinta que mis abuelos tenían y donde plantaban de todo un poquito”, recuerda.
 

4.jpeg

Hoy su vínculo con el campo ha disminuido, dado que debe estar trabajando gran parte del tiempo en la ciudad. “Pero los fines de semana que estoy en mi casa, siempre aporto al trabajo del predio”.

 

Esto le genera un sentimiento contradictorio, porque tiene la necesidad de trabajar. Sindy estudió y está trabajando de eso, “preferiría trabajar la tierra, el campo, los animales, lo que me gusta, pero no es rentable para toda la familia, tenemos un pedazo de tierra chico, apenas da para mis padres”.

 

Sindy se plantea como expectativa seguir en el campo, no salir del medio. Se proyecta seguir con la producción ganadera, que es lo que más le gusta, “pienso seguir algún día y tener mi propia producción y mi tierra”, explica.

 

En su casa hablan sobre el relevo generacional: “mi padre nos incentiva a mí y a mi hermana, él nos dice que algún día nosotras vamos a seguir con el predio. Nosotras queremos seguir, se dará más adelante, mis padres son jóvenes y tienen mucho que seguir aún”.

“Pienso tener mi propia producción ganadera y continuar con el predio familiar; sé que cuento con el apoyo de mi padre para que mi hermana y yo sigamos en el campo.”

Su participación en la organización de base

Valora positivamente el trabajo colectivo y los servicios que se pueden generar a través del mismo, “poder tener servicio de maquinaria, por ejemplo, o el campo de Colonización, eso es un gran logro; ya hace cinco años que están y viene funcionando bien. Eso dio otra posibilidad a la familia, cambió mucho”. Destaca también la importancia del acceso a capacitación, a proyectos, la convivencia en grupo, el apoyo colectivo y agradece a las personas socias “que siempre están para ayudarse unos a otros”.
 

Sindy es una socia joven, viene participando y ha apoyado a la organización siempre que ha podido, entiende que los adultos ven el hecho que los jóvenes se acerquen como una esperanza, “aunque seamos pocos, aceptan nuestra participación”.

 

5.jpeg

Encuentro en la SFR Curticeiras.

Sindy nos cuenta que comenzó su proceso de participación vinculado a una organización de productores en la Asociación de Pequeños Productores Familiares (APPFAM), que unos años después se transformó en la Sociedad de Fomento Rural de Curticeiras. Agrega que “todo empezó por mis padres, quienes se hicieron socios cuando yo aún era niña, enseguida que se formó la asociación. Mi padre empezó a hacer parte de un pequeño grupo de productores ganaderos socios de la misma, que buscaban conseguir un campo por medio del INC para llevar a cabo dicho rubro”.

 

Actualmente, Sindy es socia de la SFR Curticeiras, se asoció en el año 2021 y mantiene una participación activa. Participación a la que dio continuidad, porque “ya participaba siempre en las reuniones o actividades que se llevaran a cabo”.

“Es muy importante el acceso a capacitación, a proyectos, la convivencia en grupo, el apoyo colectivo, saber que siempre estamos para ayudarnos unos a otros.”

Su participación en la CNFR

“En el año 2022 inicié en la Comisión Nacional de Fomento Rural cómo única joven rural representante de la SFR Curticeiras y cómo única joven delegada por una organización del departamento de Rivera. Desde ese momento, siempre he participado en diversos cursos, actividades, reuniones de la organización, encuentros de jóvenes y mujeres y en todo lo que me ha sido posible”.

Considera que su participación en la Comisión de Jóvenes Referentes del Sistema de Fomento Rural “ha sido una experiencia que llevaré para la vida, se genera un ambiente muy lindo de aprendizaje y se comparten objetivos y metas, así como también preocupaciones y dudas sobre ciertos temas. Se mantienen intercambios entre productores y jóvenes sobre diferentes temas y circunstancias; existe mucho apoyo. Me siento muy contenta y acogida en los diferentes espacios en los que participo, tanto en la SFR Curticeiras como en la CNFR”.  

6.jpeg

Encuentro de la Comisión de Jóvenes Referentes del SFR.

“Mi participación en la Comisión de Jóvenes Referentes del Sistema de Fomento Rural es una experiencia que llevaré para la vida, donde se generan aprendizajes y se comparten objetivos y metas.”

Un mensaje para los y las jóvenes que quieren ser productores familiares

“No desistan, por más que parezca un camino largo y con muchas piedras, por más que se cierren muchas puertas por ser jóvenes o por distintas circunstancias que nos tiran abajo. Aunque muchas veces duden que seamos capaces de llevar adelante una producción por nuestra ‘poca experiencia’ ¡sí se puede lograr!”.

 

Somos la continuidad y el futuro de la producción familiar. No bajemos los brazos, la campaña nos necesita”.

“¡No desistan! A pesar de las dificultades y las dudas sobre nuestra experiencia, ¡sí se puede lograr!

 

Somos la continuidad y el futuro de la producción familiar. No bajemos los brazos, la campaña nos necesita”.

bottom of page